¿Qué hacía Cristina mientras se desarrollaba el cacerolazo?
La Presidenta permaneció en la quinta de Olivos, donde tuvo reuniones con Timerman y Zannini; fuera de la residencia presidencial, sonaron las cacerolas
Mientras miles de ciudadanos protestaron en todo el país contra su gestión de gobierno en el marco de la manifestación del 8N, la presidenta Cristina Kirchner permanecía dentro de la quinta de Olivos, donde tuvo reuniones durante la tarde.
La Presidenta se reunió con los asistentes a la Reunión Binacional Argentina-Chile, y luego conversó con el canciller Héctor Timerman y el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini.
Por la tarde, la mandataria brindó un discurso en el que reafirmó, frente a funcionarios, diplomáticos y gobernadores que ésta es una "década ganada para la región". "La última década ha sido la década ganada para la región porque se ha ganado en inclusión, se ha ganado en crecimiento, se ha ganado en desarrollo y hemos podido revertir fundamentalmente esa cosa que incompatibilizaba el crecimiento económico con inclusión social", dijo la mandataria en la Residencia de Olivos en la IV Reunión Binacional de Ministros Argentina-Chile.
Mientras tanto, en distintos puntos del país, tras la convocatoria de las redes sociales y con punto de encuentro principal en el Obelisco, confluyeron, pasadas las 19, varias columnas de ciudadanos. La 9 de Julio, a esa hora comúnmente colmada de tránsito, debió interrumpir la circulación y dio lugar a una enorme masa de manifestantes. Lo mismo ocurrió en las principales ciudades del resto del país.
"Once exige justicia", "No soy golpista: más seguridad, más educación", "Basta de corrupción e impunidad, menos pobreza", "No a la reforma constitucional" y "Libertad sin aprietes", fueron algunos de los carteles que mostraron los manifestantes.
La Nación
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