Inseguridad: el Gobierno y una historia llena de anuncios en los últimos años

Un repaso por los principales lanzamientos desde la creación del Ministerio de Seguridad, en 2011; la mayoría de las medidas fueron durante campañas electorales

l nuevo plan para combatir el delito lanzado hoy por el Gobierno, denominado "Programa Federal de Colaboración" y cuya prioridad será el "fortalecimiento de las instituciones del sistema de seguridad interior", es uno más de los proyectos ideados por el kirchnerismo desde 2011, cuando creó el Ministerio de Seguridad.

El 9 de diciembre de 2011, en pleno conflicto por la toma del Parque Indoamericano y de la puja con el macrismo por la administración de la fuerza pública en la Capital, Cristina Kirchner anunció por cadena nacional el desdoblamiento del Ministerio de Justicia. El nuevo Ministerio de Seguridad estuvo a cargo desde entonces de Nilda Garré, funcionaria del riñón kirchnerista que supo imponerse en Defensa. La Policía Federal, la Prefectura, la Gendarmería y el Consejo Federal de Seguridad Interior dependen desde entonces de este ministerio.

Más patrullaje

Seis meses después de su asunción, Garré lanzó su primer gran plan contra la inseguridad en el ámbito porteño. La medida fue nuevamente anunciada por la Presidenta y se denominó "Plan Unidad Cinturón Sur". Se reforzó con 2500 efectivos de la Gendarmería Nacional y de Prefectura Naval los barrios del sur de la ciudad de Buenos Aires para reasignar a 1000 agentes de la Policía Federal a avenidas de alto riesgo delictivo y al cordón de la General Paz.

"La seguridad es una demanda que nunca va a ser satisfecha porque siempre surgen nuevos problemas; el que lo prometa está mintiendo", aseguró entonces la Presidenta en un improvisado discurso en la Casa Rosada, de tono electoral, el primero tras el lanzamiento de su candidatura a la reelección, que finalmente tuvo lugar en octubre de ese año.

Plan Escudo Norte

Días más tarde, Cristina Kirchner presentó un plan de radarización militar para evitar el narcotráfico. Se anunció la instalación de 20 radares terrestres del Ejército, patrullajes con aviones Pucará y la colocación, en Santiago del Estero, del primer radar 3D fabricado por el Invap.

Quita de poder a los comisarios

En octubre, días antes de la elección, Garré anunció otro proyecto, llamado "Plan de Seguridad Urbana", y reasignó paradas policiales de comisarías y "patrullas motorizadas" de acuerdo con los reclamos vecinales y la determinación del mapa del delito.

La medida fue leída como una quita de poder de los comisarios. Los jefes de 17 comisarías de la Policía Federal ya no pudieron elegir dónde asignar a su personal para que haga tareas de vigilancia en la vía pública. 500 uniformados reforzaron los patrullajes en la vía pública, las escuelas y en espacios verdes.

En Constitución

A fines de 2011, con la reelección ya concretada, Garré anunció un plan de seguridad para Constitución. Una de las zonas más peligrosas de la ciudad fue foco por esos días de severos casos de delitos vinculados a robos, narcotráfico y trata de personas.

La ministra determinó que a ese barrio porteño se envíen 408 efectivos de la Policía Federal, se instalen 56 cámaras de seguridad y se apliquen de controles vehiculares en puntos fijos.

En las villas

En junio del año pasado, Garré lanzó un "plan maestro" de siete ministerios para combatir la inseguridad, el narcotráfico y la carencia de obras de infraestructura en los principales asentamientos de la Ciudad y del conurbano.

Se trató de un ambicioso anuncio con promesas de trabajo interdisciplinario, entre por lo menos siete ministerios, que comenzó en las villas 15 (Ciudad Oculta), 6 y 31 de la ciudad de Buenos Aires y en los asentamientos de Villa Hidalgo, la Cárcova e Independencia, del partido bonaerense de San Martín.

Cambio de mando

En mayo de este año y en forma inesperada, Cristina Kirchner hizo las primeras modificaciones en su Gabinete desde la reelección. Sacó a Nilda Garré de Seguridad y en su lugar nombró a Arturo Puricelli, quien dejó la cartera de Defensa en manos del jefe del bloque oficialista, Agustín Rossi.

La Nacion